La ampliación del aeropuerto Jorge Chávez, uno de los proyectos de inversión más importantes del país, ha sufrido múltiples retrasos en los últimos años. En la actualidad, aunque el Poder Ejecutivo ya ha anunciado que los trabajos se iniciarán por fin en junio de 2017, la concesionaria del terminal aéreo aún no recibe todos los terrenos destinados a construir la nueva infraestructura.
El Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) informó a La República que el “proceso de expropiación se ha ejecutado en su totalidad”, pero que Lima Airport Partners (LAP) solo ha recibido el 56% de los 6,8 millones de metros cuadrados (m2) comprometidos, es decir, unos 3,8 millones de m2.
El MTC asegura que en el espacio pendiente de entrega solo falta liberar una propiedad de 492 m2, que representa el 0,007% del área total donde se ejecutará la obra. La entidad agrega que la transferencia de terrenos no se ha culminado porque el posesionario de esta parcela formuló una apelación ante el Poder Judicial. Se espera que el recurso legal se resuelva este mes.
En caso el fallo sea favorable al Estado y se cumpla el cronograma de liberación de interferencias, el próximo año podrían iniciarse las obras menores, como la construcción de un cerco perimétrico. Los trabajos de mayor dimensión están previstos para ejecutarse desde el 2018.
Temas por resolver
Como obligación contractual, LAP debe construir una segunda pista de aterrizaje, un nuevo terminal de pasajeros y nuevos accesos (ver infografía). Sin embargo, para comenzar su ejecución también se deben atender tres interferencias pendientes.
Una de ellas es la reubicación de una línea de impulsión de desagües de Sedapal, que atiende la demanda de Bellavista, La Punta, Callao y parte de San Miguel.
Sedapal informó que la reubicación se puede realizar en cuatro meses, pero que aún no se tiene fecha de inicio porque las coordinaciones con el MTC no están acabadas.
Mover esta línea de impulsión, que tiene 900 metros de longitud y 1000 milímetros de diámetro, demandará una inversión de S/ 6 millones 700 mil que será asumida por el MTC. Parte de este presupuesto se usará para limpiar el terreno donde se ha acumulado una «cantidad considerable” de desmonte.
Por la zona de obras también atraviesa una tubería troncal de gas natural de la empresa Cálidda, conducto que abastece a 68 mil 943 familias de San Martín de Porres y del Callao. Este ducto también atiende a 97 empresas industriales del sector, entre ellas la refinería La Pampilla.
Cálidda informó a este diario que la reubicación ya inició y que culminará en junio del próximo año. No obstante, aclaró que el proceso es de gran complejidad porque a través de esta tubería, ubicada en un entorno urbano, se transporta combustible a muy alta presión. Se informó que el servicio no se suspenderá.
La tercera interferencia es la construcción del túnel en la avenida Néstor Gambetta, que pasará por debajo de la segunda pista de aterrizaje. El MTC informó que la obra estará lista en diciembre de este año, de tal forma que la marcha blanca iniciará en enero del 2017.
Las adendas
Debido a los retrasos en el proyecto, que debió estar operando en 2010, el MTC y LAP aseguran que es necesario ampliar el contrato de concesión, cuyo plazo original es de 30 años (vigente desde 2001).
Esta semana, el ministro de Economía, Alfredo Thorne, anunció que la adenda podría firmarse este mes. «A mediados de noviembre debemos firmar la adenda con LAP y en adelante se va a empezar construir la segunda pista», declaró el funcionario.
En abril de este año, LAP planteó que la concesión debía extenderse unos 11 años para que la empresa pueda recuperar la inversión que necesitará la ampliación del aeropuerto y no alterar su flujo de ingresos.
Cronología
Acuerdo. El contrato de concesión de LAP establece que la ampliación del aeropuerto debía ejecutarse en tres fases. La última etapa debió iniciar en 2005 y culminar en 2010.
Enero-2005
Se inaugura la primera fase de ampliación, que incluía nuevas áreas en el terminal de pasajeros, siete puntos de abordaje y nuevas zonas de embarque.
Enero-2009
Como parte de la segunda fase, se inauguró la ampliación del embarque internacional. También se remodelaron la torre central y otras zonas internas.
Febrero-2013
El MTC entrega parte de los terrenos destinados a la ampliación del aeropuerto. La transferencia debió culminarse antes del 31 de diciembre del 2015, pero no se cumplió.