En nuestro país poco a poco empieza a difundirse la tecnología de los aisladores antisísmicos, la cual reduce la vibración de un edificio ante un sismo.
Esta tecnología es usada en los edificios de más de veinte pisos, pues allí se da una mayor intensidad del movimiento vibratorio, informó la Asociación de Empresas Inmobiliarias del Perú (ASEI).
No obstante, la mayor difusión de esta tecnología sobre todo se da a nivel de edificios corporativos, pues se encarece el costo de la construcción.
“Esta tecnología de amortiguación es muy costosa, usada en Japón, y en el Perú ha llegado sobre todo para el sector corporativo”, anotó Marco del Río, director de la Feria Inmobiliaria del Perú.
La inmobiliaria CISSAC, una de las pocas compañías que ha desarrollado esta tecnología para edificios residenciales, estima que su incorporación eleva el costo del proyecto en 10% a 18%.
En Miraflores, Lima Cercado y San Miguel se han construido edificios residenciales con tecnología antisísmica.
¿En qué consiste esta tecnología? Son dispositivos circulares de metal y caucho, que se ubican en la base del edificio y sirven de amortiguadores.
De esta manera, cuando se da el movimiento telúrico, es la base la que se mueve y reduce el impacto en el resto del edificio. Los aisladores están cubiertos por la estructura del edificio.
Para conocer a detalle el funcionamiento de esta tecnología podría revisar un video explicativo haciendo click aquí.
Precios según la altura
El temor a los sismos ha generado que en la mayoría de proyectos inmobiliarios los departamentos ubicados en los pisos altos cuesten menos que en los pisos bajos (también porque se evita el riesgo de que el ascensor se malogre).
No obstante, la ASEI refiere que en algunos casos los pisos altos son más cotizados. Ello se da cuando el edificio tiene una buena vista, por ejemplo, al ubicarse frente a un área verde o frente al mar.